Una película que nos deja una gran enseñanza.
César Falla Figueroa *
Para ser sincero, pocas veces he visto una película animada que me haya movido tanto el corazón como lo sentí al ver la afamada “La Era de Hielo 3: El despertar de los dinosaurios”. Considero que estuve frente a una producción, más que pensada para los niños, es orientada para toda la familia y los amigos. Se trata de una historia en el que el amor, la lealtad, la solidaridad y la aventura, son los ejes principales de este colorido relato, en donde los personajes son considerados gente normal. La lección de convivencia y de ayuda mutua que nos deja Manny, Sid, Diego, Ellie y Scrat, es una clara muestra que unidos podemos vencer, mil y una dificultades. Amigos que acaban de encontrar a un grupo de dinosaurios que sobrevivieron a la extinción en medio del nacimiento del primer bebé de Manny y Ellie, dos mamuts que asumen desde el inicio su paternidad de manera ejemplar. Por su parte Diego (el león), tiene la idea que está perdiendo acción, mientras Sid piensa que debe formar una familia y en ese propósito involucra a los protagonistas en una fantástica experiencia. Cabe señalar que entre las novedades de este estupendo cuento animado, tenemos a Buck, una comadreja tuerta que será la causante de uno de los más atractivos episodios. Creo que la intención del director, fue construir una realidad en la que estén expresadas las emociones humanas. La película nos motiva, a que en determinadas situaciones adversas, trabajemos en equipo, aprovechando nuestras fortalezas. Para los aficionados de la saga, califican a esta versión como la mejor de todas, y no les falta razón ya que en esta oportunidad los que dan vida a esta especie de fábula son trabajados con mayor calidez que en las anteriores entregas. Súmate a esta simpática y helada experiencia y date un salto a Cineplanet, que espera por ti.
* Licenciado en Ciencias de la Comunicación
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